La Promesa.

- Juguemos a algo ¿Quieres? - Propone Luz con entusiasmo a su amiga. 
- Esta bien, estoy aburrida. ¿qué tienes en mente? - Responde con el mismo entusiasmo Sunny mientras se recoge el cabello pensando que el juego se trataba de alguna actividad física.
- Tenemos que prometernos ser amigas para siempre. - Dice muy convencida Luz mientras le agarra la mano a su amiga. Ella nota la cara de desentendida de Sunny y continua explicándole el juego. - Mira puede sonar tonto, pero creo que deberíamos asegurarnos una amistad en el futuro, estamos viviendo cosas que nos están cambiando la vida poco a poco y no quiero que eso te afecte a ti ¿Logras entenderme Sunny?- Explica muy segura de lo que dice. 
- Entiendo pero ¿Realmente lo crees necesario?  Sabes que tienes toda mi amistad y viceversa ¿Dudas de mi palabra? - Responde Sunny con la misma cara de desentendida del principio. Ya para entonces se soltó el cabello, era obvio que no iban a correr.
- ¡No!, nunca dudaría de ti después de todo lo que vivimos. Pero estos cambios me dan miedo Sunny, quiero algo que nos asegure que vamos a estar juntas mientras atravesamos todo esto nuevo que viene. - Exclama Luz mientras le dedica una sonrisa confortable a su amiga. 
- Esta bien, entiendo. ¿Que debo hacer? - Dice sunny con entusiasmo ya en sus palabras. 
- Toma mi dedo menique, y yo tomaré el tullo- Le explica Luz mientras toma su mano haciendo lo que dicen sus palabras. - Ahora cierra los ojos y repite después de mi: "hoy juramos ser amigas hasta el final no importa nada ni nadie, juntas vamos a estar y nunca nos vamos a separar" - Las dos niñas repiten lo dicho tres veces más, y luego se abrazan amistosamente. Era una escena realmente hermosa. 
- Mi mamá esta aquí debo irme Luz, te quiero mucho. Mañana nos vemos en el colegio.- Se despide sunny con alegría por lo que acababan de hacer. Sin mostrarse, Luz derrama unas lágrimas con las últimas palabras de Sunny. En el auto comienza a llorar desconsoladamente mientras su madre trata de calmarla. Algo le ocultó a su amiga que la destrozaba por dentro. Se va a mudar lejos de la ciudad por el trabajo del padre. No tuvo el valor para contárselo y como consecuencia inventó aquella promesa. Ya en su casa termina de empacar las últimas cosas de su habitación que ahora se encontraba llena de cajas con objetos dentro. Al día siguiente saldrían a las 6:00 a.m. Mientras duerme piensa en aquella promesa. Piensa en Sunny, y con una sonrisa confortable recuerda que aunque no este cerca de ella, siempre va a tener a una amiga en el mundo esperando por ella porque así lo prometieron.